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N.º 145

29 de julio de 2020

A pesar de los avances y progresos conseguidos en el ámbito de la igualdad de oportunidades, persisten situaciones y realidades, algunas especialmente preocupantes como las distintas formas de violencia contra la mujer, que muestran que todavía queda mucho por hacer para lograr la plena y efectiva igualdad entre hombres y mujeres. Precisamente por ello son necesarias las políticas públicas que contribuyan a acelerar la transición, a combatir los estereotipos sexistas y la resistencia de diversos actores sociales al cambio Como ocurre con los grandes procesos de cambio social y cultural, estamos en un momento de transición, en el que coexisten los valores y códigos de comportamiento del viejo modelo patriarcal con los de un nuevo modelo igualitario. Un proceso de transición que tiene ritmos diferentes según el ámbito que se analice. Mientras que en materia de educación prácticamente han desaparecido las desigualdades de género, las mismas son evidentes en cuestiones relevantes como el reparto de las responsabilidades del hogar y el cuidado de las hijas e hijos y otras persona dependientes, o en el plano de las relaciones afectivas, donde lamentablemente muchos hombres de todas las edades, incapaces de adaptarse a las nuevas realidades, se identifican con un modelo que les otorga el dominio y el control sobre la pareja y que legitima el uso de la violencia.
En el mundo rural las desigualdades de género son más intensas debido a un doble proceso:
a Los valores tradicionales tienen una mayor presencia, lo que provoca que el ritmo de los cambios sociales y culturales sea más lento.
b Las mujeres que viven en el medio rural tienen mayores hándicaps en su lucha por la igualdad, al contar con menores recursos de apoyo a la conciliación, de atención a situaciones de violencia de género, etc. y unas opciones más limitadas de incorporación al mercado de trabajo, lo que limita su autonomía.
Con la aprobación del conjunto de medidas que se incluyen en el V
Plan Provincial de Igualdad de Oportunidades y Contra la Violencia de Género en la Provincia de Ávila, la Diputación de Ávila pretende dar continuidad al trabajo que desde hace años viene realizando para eliminar las desigualdades de género que aún se mantienen en diferentes espacios de la vida personal, familiar y social. Una iniciativa basada en una evaluación previa de las necesidades existentes en este ámbito y en la formulación de un diagnóstico en materia de igualdad que se describe más seguidamente, con la que se pretende mejorar el bienestar de las mujeres y los hombres de la provincia.

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